Panamá dijo que Estados Unidos reconocía su soberanía sobre el Canal de Panamá, a pesar de la dura retórica de Washington, mientras las dos naciones anunciaban acuerdos para profundizar el entrenamiento militar estadounidense en la nación centroamericana.
El secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, en la primera visita de un jefe del Pentágono a Panamá en décadas, dijo que ve el canal como un terreno clave que Panamá aseguraría junto con Estados Unidos, y no con China.
“Estamos ayudando a recuperar el Canal de Panamá de la influencia comunista china”, dijo Hegseth en una rueda de prensa en Ciudad de Panamá. El gobierno panameño ha rechazado enérgicamente las acusaciones estadounidenses de que la vía acuática clave está controlada por China.
Pero funcionarios y expertos estadounidenses actuales y anteriores afirman que Estados Unidos tiene preocupaciones legítimas en materia de seguridad sobre la presencia de China en Panamá, incluyendo que los puertos y otras infraestructuras en manos de empresas chinas podrían ser utilizados para el espionaje.
Durante la visita de Hegseth, Estados Unidos y Panamá emitieron declaraciones conjuntas sobre la profundización de la cooperación en materia de seguridad. Pero la versión en inglés publicada por el Pentágono no incluía una frase que sí estaba en la versión en español publicada por Panamá y que hablaba de la soberanía de Panamá sobre el canal.
La frase decía: “Además, el Secretario Hegseth reconoció el liderazgo y la soberanía inalienable de Panamá sobre el Canal de Panamá y sus áreas adyacentes”.
A la pregunta de si reconocía la soberanía de Panamá, Hegseth respondió: “Ciertamente entendemos que el Canal de Panamá está en Panamá, y proteger la soberanía panameña de influencias malignas es importante”.
“Por eso, cuando el presidente Trump dice que estamos recuperando el Canal de Panamá de la influencia china, eso implica una asociación con Estados Unidos y Panamá”, dijo Hegseth.
“Y estamos agradecidos de que hayan dado la bienvenida a las tropas estadounidenses en suelo panameño por invitación a través de ejercicios rotativos y conjuntos”.
El ministro panameño de Seguridad Pública, Frank Abrego, dijo que Panamá no permitiría bases militares permanentes.
“El secretario Hegseth, en la reunión que tuvimos en privado reconoció la soberanía de Panamá sobre el Canal de Panamá”, dijo a los periodistas.
Más del 40% del tráfico de contenedores de Estados Unidos, valorado en unos 270.000 millones de dólares al año, pasa por el Canal de Panamá, lo que supone más de dos tercios de los buques que pasan cada día por la segunda vía interoceánica más transitada del mundo.
El viaje de Hegseth se produjo tras conocerse que la administración Trump ha solicitado opciones al ejército estadounidense para garantizar el acceso al canal, que Estados Unidos construyó hace más de un siglo y entregó a Panamá en 1999.
Trump se ha quejado de que ese fue un mal acuerdo para Estados Unidos.
Mientras que Hegseth habló de trabajar con Panamá para eliminar la “maligna” influencia china, Trump ha hablado en términos más amplios y no ha descartado el uso de la fuerza militar.
Funcionarios y expertos estadounidenses actuales y anteriores afirman que Estados Unidos ha encontrado un socio dispuesto a hacer frente a la influencia china en el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, con quien Hegseth se reunió el martes.
En febrero, Mulino anunció el paso formal de Panamá para salirse de la Iniciativa del Cinturón y la Ruta de China y ha ayudado a la represión de Trump contra los migrantes.
Hegseth elogió a Mulino, diciendo que su gobierno comprendía la amenaza de China, y sus comentarios durante su viaje sobre que Panamá estaba a la cabeza en la resolución de los problemas de seguridad del canal parecieron ser un guiño a las sensibilidades panameñas.
“Estamos profundamente agradecidos por la amistad de nuestros homólogos panameños, su colaboración y su liderazgo aquí en Panamá y en toda la región”, dijo Hegseth.