La cuarta revisión del Acuerdo Stand by con el Fondo Monetario Internacional (FMI) está reactivando la devaluación del lempira y la incertidumbre económica por la demanda de dólares para comprar externas.

Por quinta sesión consecutiva, la Subasta de Divisas en el Banco Central reporta un aumento en el Tipo de Cambio de Referencia (TCR) del dólar que pasó de 26.1423 a 26.1636 lempiras.
Por la intermediación financiera, el precio de venta del dólar subió a 26.2944 lempiras, acercándose al valor récord de 26.38 lempiras registrado a finales de julio anterior.
Con esto la devaluación interanual supera el 5,5%, con 1.38 lempiras de pérdida del poder adquisitivo, y un anual 3% (0.78 centavos) en relación a diciembre.
El Banco Central aplica, desde septiembre de 2024, una acelerada devaluación tras la primera revisión del Acuerdo con el FMI.
Causas y efectos de una devaluación
Las devaluaciones pueden provocarse -en términos generales- a partir de una crisis de comercio exterior o de una crisis financiera. En el primer caso, se produce cuando los importadores demandan dólares para comprar productos, bienes intermedios (como materias primas e insumos) o de capital (como maquinarias), pero no hay suficiente oferta de esta divisa.
El segundo motivo (crisis financiera) se produce cuando se vuelve insostenible la acumulación de deuda. La falta de dólares es un factor común en ambas situaciones.
Adicionalmente, algunos economistas puntualizan que una mayor emisión monetaria para financiar el déficit fiscal (el Estado gasta más de lo que recauda de impuestos) puede provocar una pérdida del valor de la moneda, sobre todo en momentos en que las personas no quieren lempiras y buscan refugio en el dólar.
Este año, el país registra un aumento en el ingreso de divisas provenientes de remesas y exportaciones de café. Esto ha generado un alivio en el acceso a divisas y ganancia teórica de competitividad, pero el costo es elevado en el ingreso de la población.