Estimación de organismos internacionales es de un 6%
El Directorio del Banco Central de Honduras (BCH), revisó a la bajas cifras macroeconómicas del país por los efectos del Covid-19, y estimó una caída de la producción nacional (PIB) entre -7 y -8%.
La drástica caída no tiene procedentes y es muy particular. Según el BCH, a pesar de la baja económica el país registra buenos indicadores externos (más reservas), menor baja en la remesas (-5% a la fecha), una inflación controlada y proyecta un repunte del crédito y los depósitos para el cierre del año.
En mayo anterior la revisión de las metas del Programa Monetario 2020-2021, ya hablaba de una baja de -2,9 a -3,9%, pero la menor actividad económica de mayo de -9,4%, hacía preveer una baja cercana a las proyecciones internacionales de 6%.
Las nuevas proyecciones
La nueva estimación del PIB es 100% peor de lo que se esperaba en mayo (-2,9 a -3,9%), aunque se revisó hacía arriba el crecimiento del 2021 (hasta 5.,5%).
Las exportaciones caerán 3% más, y podrían reducirse hasta un -21,1%, mientras se las importaciones se mantienen la proyección de -17,1%.
Las reservas internacionales, a pesar del impacto de la pandemia, seguirán por arriba de los seis meses de cobertura. La inflación también se mantiene en el rango de 3 a 5% anual.Sistem
Repunte del sector fianciero
La buena noticia es para la banca privada ya que la reactivación económica y la necesidad de inversiones públicas y privadas, impulsaría el crecimiento de los depósitos y del crédito, pero a un nivel menor al del 2019..
Los depósitos crecerían 9,1%, muy superior al 4,2% estimado en mayo, mientras los préstamos un 6,8% (4,5% en mayo).
Para el 2021 se proyecta un repunte en todos los sectores.
La opinión del Directorio
El entorno actual, caracterizado por la agudización de la pandemia del Covid-19 y la expansión de las medidas de confinamiento de la población y restricción a la movilidad de bienes y servicios, ha generado un deterioro en la actividad económica y en el empleo, mayor que lo previsto inicialmente, señala el BCH.
El nivel de incertidumbre sobre las perspectivas de la economía internacional es muy superior al habitual, agregando una alta variabilidad a la velocidad y el impacto que tendrían las medidas económicas aplicadas por los Gobiernos para contrarrestar este choque.
“Aún con la apertura gradual de la economía nacional, la profundidad de las pérdidas registradas hasta la fecha permite anticipar que en 2020, se registraría una caída del Producto Interno Bruto (PIB) anual mayor a la prevista en mayo recién pasado, pero
anticipándose una recuperación para 2021″, concluye la autoridad monetaria.
Destacan que a pesar de este escenario negativo para 2020, se prevé que la posición externa del país continúe fortalecida, lo que se evidencia en una revisión a la baja del déficit en cuenta corriente del sector externo, explicada en su mayoría por una menor caída de las remesas familiares a la prevista.
Lo que si aumentará es el déficit fiscal por la mayor contratación de deuda externa para cubrir los gastos del Gobierno para la lucha contra el Covid-19 y el presupuesto general.