El G7, grupo de los siete países más ricos de mundo, se comprometió a asegurar el suministro de minerales críticos, esenciales para la transformación energética y digital, en una de las seis declaraciones que el grupo de naciones aprobó en la segunda y última jornada que se realizó en la localidad canadiense de Kananaskis.
Sin mencionar a China, que controla la inmensa mayoría de la producción y distribución de los llamados minerales críticos (como tierras raras, litio o cobalto), el G7 dijo que ante la concentración del suministro en ciertos países y los riesgos de manipulación del mercado, los líderes se comprometen a asegurar cadenas de suministro resilientes, éticas y sostenibles.
“Reconocemos que las políticas y prácticas ajenas al mercado en el sector de los minerales críticos amenazan nuestra capacidad para adquirir muchos minerales críticos, incluidos los elementos de tierras raras necesarios para imanes que son vitales para la producción industrial”, señaló la declaración.
El G7 desarrollará un plan de acción para fomentar la inversión conjunta en proyectos de minería, procesamiento y reciclaje en países industrializados y en desarrollo con lo que se crearán empleos y se atraerá capital privado responsable.
La segunda declaración del G7 se refiere a la inteligencia artificial (IA). El grupo de siete naciones dijo que quiere impulsar su adopción en el sector público y privado, y especialmente en las pequeñas y medianas empresas (pymes), “la columna vertebral” de las economías del grupo.
Pero también se reconoce el coste medioambiental que supone la IA, por lo que el G7 se compromete a desarrollar modelos más eficientes y sostenibles, al tiempo que se promocionará su uso para mejorar la gestión energética.
Relacionada con la IA es la declaración sobre computación cuántica, que el grupo considera puede generar transformaciones profundas en sectores como la salud, la energía, las finanzas o la agricultura. El G7 también advierte de su impacto en la seguridad internacional, dado que puede hacer obsoletos los sistemas actuales de protección de datos.
Otra de las declaraciones aprobadas por la Cumbre del G7 de Kananaskis se refiere al tráfico de personas y migrantes.
“Estamos determinados a mejorar la gestión fronteriza y a reforzar y desmantelar organizaciones criminales transnacionales que se benefician tanto del tráfico de migrantes como del de personas”, afirmaron los Siete.
La declaración señala que se promoverán acuerdos con empresas tecnológicas para frenar la utilización de redes sociales por parte de las mafias.
Las dos últimas declaraciones son sobre el aumento de los casos de represión transnacional, que se considera una agresiva injerencia extranjera mediante la cual algunos países buscan intimidar, acosar, dañar o coaccionar a personas o comunidades fuera de sus fronteras, y los incendios forestales.
Este último es un creciente problema para Canadá, el segundo país más extenso del mundo y con una de las mayores superficies boscosas del planeta.
En la declaración, el G7 alerta sobre el aumento global de incendios forestales extremos que afectan a la salud, destruyen hogares y ecosistemas, y generan enormes costes públicos. El G7 defiende una acción coordinada para prevenir, combatir y recuperarse mejor de estos eventos climáticos.