China ha ordenado a sus aerolíneas que no acepten más entregas de aviones Boeing en respuesta a la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles del 145% a los productos chinos, informó Bloomberg el martes, basándose en la información de personas familiarizadas con el asunto.
Las acciones de Boeing, que considera China uno de sus mayores mercados de crecimiento y donde su competidor Airbus ocupa una posición dominante, bajaban un 3% en las operaciones previas a la apertura del mercado.
Pekín también ha pedido a las compañías aéreas chinas que suspendan las compras de equipos y piezas de aviones a empresas estadounidenses, según la información de Bloomberg.
Se espera que la medida de China de detener las compras de componentes relacionados con los aviones aumente los costos de mantenimiento de los reactores que vuelan en el país.
Estados Unidos y China se han visto envueltos en una guerra arancelaria desencadenada por las políticas comerciales del presidente estadounidense, Donald Trump.
China subió la semana pasada los gravámenes a las importaciones estadounidenses al 125% en represalia por los aranceles estadounidenses.
El Gobierno chino está considerando formas de proporcionar asistencia a las aerolíneas que arriendan aviones de Boeing y se enfrentan a costos más altos.
Boeing no respondió de inmediato a una solicitud de Reuters para hacer comentarios.
Un arancel del 125% elevaría significativamente el costo de los aviones de Boeing destinados a las aerolíneas chinas, convirtiéndolos en una carga financiera e incitando potencialmente a las aerolíneas a considerar alternativas como Airbus y el operador nacional COMAC.
Las tres principales aerolíneas chinas —Air China 601111.SS, China Eastern Airlines 600115.SS y China Southern Airlines 600029.SS— tienen previsto recibir 45, 53 y 81 aviones Boeing, respectivamente, entre 2025 y 2027.
Según los analistas, la escalada de aranceles entre las dos mayores economías del mundo corre el riesgo de paralizar el comercio de mercancías entre ellas. Ese comercio estaba valorado en más de 650.000 millones de dólares en 2024.
Trump, que dijo el viernes que se sentía cómodo con los aranceles a China, también sugirió que un acuerdo con Pekín podría estar en el horizonte, pero aún no se ha llegado a ningún acuerdo.