El Grupo Inditex, propietario de marcas como Zara, Stradivarius o Massimo Dutti, presentes en mall Multiplaza de Tegucigalpa, podría enviar a casa temporalmente a 25.000 personas que trabajan en sus tiendas españolas si el estado de alarma del país se prolonga más allá del 15 de abril, dijo un representante de la compañía.
El expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), uno de los mayores anunciados hasta la fecha en Europa con motivo de la propagación del coronavirus, no incluiría a empleados de logística, servicios centrales y operaciones de fabricación, dijo la fuente consultada, que no quiso ser identificada.
El Gobierno español decretó el sábado pasado el estado de alarma durante un periodo de 15 días para combatir el coronavirus, ordenando el cierre de bares, restaurantes y la mayoría de comercios, así como fuertes restricciones al movimiento de personas.
Inditex tiene la mayor red de tiendas del grupo en España, que representan alrededor de una sexta parte de sus ventas globales, pero llevan cerradas desde entonces y el grupo sigue pagando los sueldos de sus empleados.
La compañía dijo el miércoles que las ventas se desplomaron un 24% en las dos primeras semanas de marzo, con casi la mitad de sus 7.500 tiendas cerradas en todo el mundo.
El grupo emplea a alrededor de 175.000 personas en países que incluyen China, Rusia y Estados Unidos.
Fabricantes de automóviles como Seat, su matriz germana Volkswagen, y el francés Renault, así como la cadena de comida rápida Burger King, figuran entre las grandes empresas que ya han despedido temporalmente a miles de trabajadores en España.
Iberia, la aerolínea española del hólding IAG, dijo el jueves que despediría hasta el 90% de su personal de vuelo mientras los aviones estén en tierra.
Los ERE temporales en masa no se limitan a España. El viernes, el fabricante de camiones Volvo dijo que pondría a todos sus 20.000 empleados en Suecia en situación de despido temporal a corto plazo.
El viernes las acciones de Inditex subían más del 7%, en una jornada en la que el Ibex-35 repuntaba un 3%.