Es el primer secretario de gabinete de EE UU al que acusan en casi 150 años
Con un margen muy estrecho, la Cámara de Representantes de Estados Unidos votó a favor del juicio político contra el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, lo que lo convierte primer secretario de gabinete al que acusan en casi 150 años.
La votación quedó 214-213. Tres republicanos, Ken Buck de Colorado, Mike Gallagher de Wisconsin y Tom McClintock de California, votaron con los demócratas en contra de la medida.
En reacción al resultado, la portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, Mia Ehrenberg, dijo en un comunicado que “los republicanos de la Cámara serán recordados en la historia por pisotear la Constitución para obtener beneficios políticos en lugar de trabajar para resolver los graves desafíos en nuestra frontera”. Y añadió que Mayorkas “seguirá trabajando todos los días para mantener seguros a los estadounidenses”
El resultado ocurre una semana después de la sorprendente derrota que sufrieron los republicanos de la Cámara en la anterior votación para llevar a Mayorkas a juicio político. Las deserciones dentro de la bancada del Partido Republicano y una ausencia clave hundieron el esfuerzo.
La semana pasada, la ausencia del líder de la mayoría de la Cámara de Representantes, Steve Scalise, y la sorpresiva asistencia del demócrata de Texas Al Green, que acababa de ser operado y llegó a la cámara para votar, negaron a los republicanos la mayoría que necesitaban, con un empate de 215-215.
Dados los estrechos márgenes en la Cámara de Representantes, los republicanos sólo podrían permitirse el lujo de perder un puñado de votos dependiendo del número de miembros ausentes.
En la historia de Estados Unidos, solo un funcionario de gabinete había sido acusado antes de Mayorkas: el secretario de Guerra William Belknap en 1876.
La frontera sur, un tema clave
La votación a favor del juicio político de este martes se produce en un momento en que los republicanos de la Cámara de Representantes se enfrentan a una creciente presión de sus bases para exigir responsabilidades al Gobierno de Biden en un tema clave de su campaña: la frontera.
Sin embargo, cuando se les presentó una solución legislativa bipartidista negociada con los republicanos del Senado, los miembros del Partido Republicano de la Cámara la rechazaron de forma tajante, lo que contribuyó al fracaso final del acuerdo.
Aunque Mayorkas sea sometido a juicio político en la Cámara de Representantes, es muy poco probable que sea acusado en el Senado, controlado por los demócratas.
Los demócratas del Senado todavía están sopesando cómo responder ante el juicio político de Mayorkas: o bien seguir adelante con el juicio, o desestimarlo rápidamente, dado que consideran que se trata de un asunto claramente político.
Si bien los republicanos han estado investigando la gestión de Mayorkas en la frontera desde que recuperaron la mayoría en la Cámara de Representantes, el impulso para planear un juicio político rápido contra el secretario cobró fuerza el mes pasado cuando republicanos clave de distritos indecisos expresaron una nueva apertura a la idea en medio de un reciente aumento de cruces de migrantes en la frontera sur.
eñaló que la “vergonzosa votación” de hoy refleja que a los republicanos de la Cámara de Representantes “nunca les ha importado la seguridad fronteriza, sólo cobardes juegos políticos”.
“Se niegan a dialogar con la Administración Biden y los demócratas del Congreso sobre soluciones de inmigración de sentido común. Sólo están impulsando este juicio político para socavar la acción bipartidista, fomentar el caos y reforzar a Donald Trump”, añadió.
En esa misma línea, el líder de la mayoría en el Senado, el demócrata Chuck Schumer, dijo que la única razón para este juicio político es que el presidente, o ‘speaker’, de la Cámara, Mike Johnson, “apacigüe aún más a Donald Trump”.
El juicio político a Mayorkas es improbable que prospere, en vista de que tras la votación de hoy el ‘impeachment’ pasa a manos del Senado, donde se requieren dos tercios de los votos y los demócratas ostentan la mayoría.
En la Cámara Alta incluso basta una mayoría simple para que el juicio político ni siquiera se someta a votación, un escenario ya contemplado por algunos senadores demócratas.