A la problemática de déficit de potencia de energía para suplir la demanda en verano, se suma la falta de inversiones en líneas de transmisión para llevar la energía a los centros de desarrollo y a las residencias, afirmó el presidente del Sindicato de la ENEE, Miguel Aguilar.
La Comisión Reguladora de Energía (CREE), junto al Operador del Sistema (ODS), advierten que se necesita hacer una licitación de 260 megavatios de energía en el primer trimestre del año, para evitar racionamientos en este y los próximos años.
Aguilar, señala que para este año se necesitarán entre 60 y 100 megavatios, que es la diferencia entre la generación firme (1.600) y la demanda estimada (1.660 a 1.700 MW).
Explicó que se cuenta con una capacidad instalada de 2.638 megavatios, pero no todas las energías contratadas pueden operar al mismo tiempo y la “generación firme es de 1.600 megavatios”.
“Si hacemos el cálculo, se ocuparían entre 60 a 100 megavatios para hacerle frente a la demanda de este 2020, pero lo que sí es importante decir y que lo hemos hablado con la Comisión Interventora es si están gestionando para poder ampliar las líneas de transmisión”, apuntó.
“Se necesita ampliar las subestaciones y la transformación en el país, porque es difícil que se meta más energía al sistema cuando no lo podemos transportar. Cuando no lo podemos transformar, no lo podemos distribuir y eso nos acarrea un problema, porque, sin duda, este sobrecalentamiento nos puede llevar a apagones en los meses del año que hay más alta temperatura, que eso es lo que se proyecta en este 2020”, agregó.
Entonces, opinó, antes de pensar en comprar más energía deben de tener las condiciones para transportar, para transformar y para llevar en distribución con los calibres adecuados, esa energía al usuario.
Licitación o compras al exterior
Para Salomón Ordóñez, representante de los productores y asesor del Cohep, ambos problemas deben atenderse de manera inmediata y hacer el llamado a una licitación internacional para que las empresas tengan tiempo para establecerse y generar lo más rápido posible.
Consideró que un decreto de emergencia sería extemporario porque ya no podría conseguir la energía a tiempo para este año, pero “se debe acelerar los procesos de licitación de forma transparente para prever los posibles racionamientos que vengan en el 2021 y el 2022”.
La capacidad instalada de las plantas térmicas actuales ya está a toda su capacidad y es de unos 800 megavatios, agregó.
“Hay tres opciones de uso inmediato que se pueden utilizar: la compra a Centroamérica, donde podría haber excedentes para poder comprar, el segundo es el uso racional de los usuarios, especialmente los residenciales en esas horas de demanda alta, seis a nueve de la noche. Una tercer opción , es decirle a los que tienen sus propios motores de autogeneración que se puedan abastecer ellos mismos mientras duran los racionamientos”, concluyó.