La agencia de calificación crediticia Fitch ha ajustado hoy la perspectiva de Francia de “estable” a “negativa”, señalando un aumento de los riesgos en la política fiscal. No obstante, la agencia ha mantenido la calificación de incumplimiento del emisor a largo plazo en moneda extranjera del país en “AA-“.
La decisión de Fitch refleja preocupaciones sobre la trayectoria fiscal de Francia. La agencia anticipa que el desempeño fiscal de este año dejará al país galo en una posición más vulnerable de lo esperado anteriormente. Se prevé que los déficits fiscales más amplios proyectados contribuyan a un aumento significativo de la deuda pública, que se espera alcance alrededor del 118,5% del PIB para 2028.
La revisión de la perspectiva a “negativa” señala posibles desafíos futuros para la salud fiscal de Francia y podría implicar futuras rebajas en la calificación si la situación empeora. La confirmación de la calificación “AA-” indica que, si bien los riesgos han aumentado, Francia mantiene actualmente una alta calidad crediticia.
Esta revisión pone de manifiesto la creciente preocupación por la sostenibilidad fiscal a largo plazo de una de las principales economías de la eurozona. Los inversores y analistas estarán atentos a las medidas que pueda tomar el gobierno francés para abordar estos desafíos fiscales y mantener la confianza de los mercados.