La junta de la Federal Deposit Insurance Corp. (FDIC) aprobó la declaración final de la política sobre transacciones de fusiones bancarias para añadir un escrutinio extra a los acuerdos.
Según la nueva política, la FDIC tendrá en cuenta los efectos competitivos de una fusión, el riesgo financiero, la conveniencia y las necesidades de la comunidad y la estabilidad financiera.
Se espera que las transacciones que den lugar a una organización con más de 50.000 millones de dólares en activos totales se enfrenten a audiencias públicas, añadió el regulador.
La política de declaración final sustituye a la política existente, que se actualizó en 2008.
El vicepresidente Travis Hill, miembro republicano de la junta que votó en contra, dijo que el plan potencialmente hace que el proceso sea más largo, más difícil y menos predecible.
“También creo que nuestro análisis del factor de estabilidad financiera debería reconocer que una fusión puede tanto sumar como restar riesgos a la estabilidad financiera, y debería centrarse más en una comparación antes y después, en lugar de analizar únicamente la institución resultante”, dijo Hill.
La junta directiva de la agencia votó a favor por 3-2 durante una reunión el martes.
Para que un acuerdo obtenga la aprobación, la Fdic esperaría que la empresa resultante “satisfaga mejor las necesidades y conveniencias de la comunidad a la que se va a servir de lo que ocurriría sin la fusión”, según un comunicado de la agencia. Las combinaciones que conduzcan a una empresa con más de $100.000 millones en activos enfrentarían un proceso más difícil, ya que la agencia evaluaría los riesgos potenciales para el sistema financiero.
El resultado sería un acto de equilibrio, en el que los funcionarios tendrían autoridad para evaluar y tal vez rechazar cualquier transacción de fusión que no cumpla con uno o más de los criterios. Por ejemplo, la Fdic, evaluaría si el solicitante ha demostrado que los beneficios generados por la conveniencia y las necesidades de la comunidad superarán claramente los efectos anticompetitivos.
Martin Gruenberg, presidente de la Fdic,, calificó el cambio como “un hito significativo en los esfuerzos de la Fdic, por actualizar, fortalecer y aclarar su enfoque hacia las fusiones bancarias”. Ambos miembros republicanos de la junta votaron en contra del plan, diciendo que sería demasiado oneroso para la industria.