Al cierre de julio de 2024, el sector público contabilizó un saldo de deuda externa de 9.215 millones de dólares, menor en $155.9 millones al compararlo con el reportado en diciembre del año anterior ($9,371.6 millones), informó el Banco Central.
La menor deuda se debe a los “mayores pagos de capital, los que ascendieron a 473.1 millones de dólares”, frente a los desembolsos recibidos de 344.8 millones de dólares, unido a una variación cambiaria favorable que disminuyó el saldo en 27.6 millones”.
El 91,3% de la deuda externa pública ($8,416.1 millones) lo adeuda el Gobierno General, el 7% ($643.9 millones) la Autoridad Monetaria, el 1,5% ($139.7 millones) las Empresas Públicas No Financieras (ENEE y ENP), y el 0,2% ($16.0 millones) corresponde a las Instituciones Públicas Financieras (Banhprovi).
En lo que se refiere al tipo de acreedor, el 73,1% ($6.732 millones) son obligaciones con organismos multilaterales, 14,9% ($1.377 millones) con acreedores comerciales instituciones financieras y proveedores) y 12% ($1.106 millones) con instituciones bilaterales.
Por otra parte, el saldo de deuda externa pública se compone de dos instrumentos: Préstamos, los que representan el 85,9% ($7,915.7 millones) y Títulos Valores el 14,1% ($1.300 millones), colocados en el mercado financiero mundial, por medio de dos emisiones; la primera por $700 millones, llevada a cabo en enero de 2017 y la segunda en junio de 2020 por $600 millones.
Ambas emisiones deberán ser canceladas mediante un único pago de capital al vencimiento en 2027 y 2030, respectivamente.
Es importante indicar que, en 2013, el Gobierno realizó dos colocaciones de bonos soberanos en el mercado internacional, uno de ellos fue cancelado en 2020 y el otro fue pagado mediante tres abonos iguales de capital a partir de marzo 2022 y concluyendo en marzo de 2024.