En los últimos doce meses, de agosto de 2023 a agosto de 2024, los hondureños han sufrido un impacto promedio de 4,99% en los precios de una variedad de productos y servicios, pero al menos cuatro tienen mayor impacto.
Según el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que mide el Banco Central, la lista la encabezan los alimentos, seguido de las gasolinas, alquiler de vivienda y servicios públicos, turismo y prendas de vestir. Estos cuatro grupos concentran el 75% de la inflación interanual al mes de agosto.
La tasa de inflación interanual a agosto de 2024 fue de 4,99%, menor en 0.72 puntos porcentuales respecto a la observada doce meses atrás (5,71%), aún “dentro del rango de tolerancia de mediano plazo de la Autoridad Monetaria (hasta 5%)”.
El BCH destaca el menor crecimiento del precio promedio de algunos alimentos (maíz, huevos y frijoles, entre otros), así como de los combustibles de uso vehicular y doméstico.
Aún así, el rubro de “Alimentos y Bebidas no Alcohólicas” con 1.93 pp; “Alojamiento, Agua, Electricidad, Gas y Otros Combustibles” aumentó 0.98 puntos porcentuales.
Los precios en “Hoteles, Cafeterías y Restaurantes” contribuyeron un 0,46 pp en el IPC, seguido de las “Prendas de Vestir y Calzado” con 0.38 pp, aportando en conjunto cerca del 75% de la inflación interanual.
Los Otros Rubros, que incluye servicios como salud, educación, etc, aportaron 1,24 pp.
Por otra parte, la inflación subyacente interanual se desaceleró por segundo mes consecutivo a 4,94%, menor en 1.00 pp a la registrada al
mismo mes de 2023 (5,94%) e inferior a la inflación general (4,99%).
El menor crecimiento de los precios al consumidor de alimentos industrializados determinó la desaceleración interanual de la inflación subyacente respecto al mes precedente.
El indicador de inflación subyacente en Honduras excluye un total de 37 bienes y servicios, entre alimentos perecederos no industrializados (excepto carnes), tarifas de energía y combustible.
