La demanda de diésel en China cayó un 11% interanual hasta los 3.9 millones de barriles diarios en junio, el mayor descenso porcentual desde julio de 2021, según informó el jueves la Administración de Información Energética (AIE) de Estados Unidos.
La lenta demanda de combustible en China ha pesado mucho en los mercados petroleros este año, desconcertando a los participantes del mercado que habían apostado a que la segunda economía más grande del mundo seguiría siendo un motor de crecimiento.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo ha rebajado esta semana su previsión de demanda de petróleo para 2024, alegando unas expectativas menos alentadoras para China, lo que supone el primer recorte desde que se publicaron las perspectivas hace más de un año.
La Agencia Internacional de la Energía, con sede en París, recortó su previsión para 2025, citando también la debilidad de la economía china.
El consumo de diésel alcanzó un máximo histórico en China el año pasado, pero la demanda ha caído bruscamente desde el segundo trimestre de este año, según la EIA.
La caída se debe en gran medida a dos factores: el debilitado sector inmobiliario del país ha ralentizado el crecimiento económico y el gas natural licuado está sustituyendo al diésel en los camiones pesados, agregó.