En este año, Honduras no mejoró su posición, 101 de 141 naciones, en el Índice de Competitividad Global 2019 presentado por el Foro Económico Mundial (FEM).
De acuerdo al informe el país no muestra avances en indicadores claves para el desarrollo económico actual como son la tecnología, instituciones fuertes, apertura de negocios e infraestructura.
En 2018 tuvo la posición 101 entre 140 naciones.
Las posiciones en estos indicadores reflejan el retraso económico del país. En adopción de las tecnologías de la información y comunicación (TIC) se ubica en la posición 124, seguido por su tradicional retraso institucional (116), habilidades (108), capacidad de innovación (106), dinamismo del mercado (103), tamaño del mercado (100) e infraestructura (99).
El nivel institucional, donde se incluye el tema de seguridad, lucha contra el crimen, terrorismo y confianza policial, independencia judicial, transparencia, entre otros, el país no avanzó nada, a pesar del millonario gasto presupuestario.
Bajo el indicador de libertad de la prensa.
El sistema financiero tiene la mejor nota para el país, se ubica en la posición 71 a nivel global, sin brecha crediticia, pero con baja en regulación financiera (posición 117).
A nivel de Centroamérica, Honduras está por debajo de Guatemala (98), Costa Rica (62) y Panamá (66), pero supera a El Salvador (103) y Nicaragua (109).
País “estancado”
Para el director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), Rafael Medina, consideró que este resultado refleja que el país se encuentra estancado.
“Estamos estancados y necesitamos mejorar en muchos temas”, señaló.
Por su parte, Santiago Herrera, gerente de Política Económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), el estancamiento de la competitividad es regional, aunque reconoce que la falta de capacidad tecnológica impactará en el nivel de vida de la población.
“En general, carecemos de las reglas de juego y la separación de poderes, especialmente, del Poder Judicial, parece ser que uno de los elementos comunes es la calidad de las instituciones, los pesos y contrapesos y el problema de la seguridad jurídica”, señaló.
Entre las recomendaciones que propone el Cohep al gobierno es de dar seguimiento a los indicadores de competitividad y de incluirlos en las metas de las políticas de las diferentes Secretaría de Estado y entes descentralizados.