Según cifras preliminares del viceministro de Turismo, Luis Chévez, durante la Semana Santa se movieron 2.4 millones de personas que dejaron una derrama económica de 4.500 millones de lempiras.
El gasto promedio por persona en viaje, se estima en 1.800 lempiras. Se espera que la cifra oficil sea mayor los 4.500 millones de lempiras.
“Esperamos que no solo se cumplan las expectativas del turismo internacional, sino que se superen, especialmente con la llegada de hondureños desde Estados Unidos, así como ciudadanos de El Salvador, Guatemala y Nicaragua. La frontera de Guasaule también reportó un aumento significativo en la entrada de turistas al país”, declaró.
Las regiones más visitadas durante este período fueron la costa Norte, el lago de Yojoa, Comayagua y Copán Ruinas, así como las zonas costeras del Golfo de Fonseca, donde Amapala registró una amplia movilidad. Los niveles de ocupación hotelera alcanzaron un alto porcentaje, lo que refleja el éxito del sector turístico en Honduras.
La Comisión Nacional de Prevención en Movilizaciones Masivas (CONAPREMM) hizo la estimación del millonario gasto económico, teniendo en cuenta el largo feriado otorgado para los empleados público de nueve días.
Sin confirmar oficialmente se estima que más de 50.000 extranjeros visitaron el país en esta semana. Solo en la frontera de El Amatillo, con El Salvador, se registró un ingreso de 16.000 visitantes hasta el sábado 30 de marzo y a las Islas de la Bahía se movilizaron unas 14.000 personas.
Aunque los cuatro días festivos de la Semana Santa (de jueves a domingo) es de carácter religioso, se ha convertido en uno de tres feriados nacionales en el país (semana morazánica y navidad) con cada vez menos actos religiosos.
Los países con más habitantes sin religión en Latinoamérica
El feriado representa una gran oportunidad para el desarrollo del turismo interno en Honduras, aunque el mayor gasto se realiza fuera de las fronteras.