Barclays Plc planea detener la financiación directa de nuevos proyectos de petróleo y gas, a medida que el banco británico amplía el alcance de activos a los que les resultará más difícil acceder al capital en el futuro.
El plan implica restricciones para clientes nuevos y no diversificados de petróleo y gas que participan en la expansión, según un comunicado enviado por correo electrónico. Barclays dijo que su nueva política establece “expectativas claras de estrategias de transición y requisitos de descarbonización para los clientes de energía”.
Barclays ha estado históricamente asociado con la industria de combustibles fósiles, esto lo ha convertido en blanco para activistas.
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El anuncio se produce poco después de que Barclays dijera que estaba estableciendo un equipo de transición energética dentro de su banco corporativo y de inversión, que, según informó Bloomberg News, estará compuesto por más de 100 banqueros. Esto ocurre mientras la industria financiera busca beneficiarse de las oportunidades comerciales representadas por la transición de los combustibles fósiles a fuentes de energía bajas en carbono, un cambio que BlackRock Inc. ha identificado como una “mega” fuerza que dirige la economía global.
Los préstamos de Barclays para petróleo y gas representaron alrededor de 2% de su cartera total de préstamos y 2,6% de su negocio en los mercados de capitales, según su informe anual de 2022. Además, otorgó $4.900 millones en préstamos a la industria de los combustibles fósiles en 2023, en comparación con un promedio de $7.200 millones durante los siete años anteriores, según muestran datos compilados por Bloomberg.
El banco ha estado aumentando los préstamos y las suscripciones ambientales más rápido que sus pares, según un análisis de diciembre realizado por Bloomberg NEF que analizó la proporción entre financiamiento verde y financiamiento fósil. Barclays estaba en 1,55 a finales de 2022, es decir, cada dólar que proporcionó a la industria de combustibles fósiles, ya sea a través de préstamos directos o suscripción de deuda, asignó $1,55 a proyectos ecológicos, mostró el análisis de Bneff.
La decisión refleja medidas similares de freno como Societe Generale SA que aseguró, en septiembre, la suspensión de préstamos de este tipo.
