La economía de Estados Unidos se expandió 2,9% en el último trimestre de 2022, luego de un salto de 3,2% en el trimestre anterior y dos caídas consecutivas en la primera mitad del año. Considerando todo 2022, el PIB de EE UU creció 2,1%, por debajo de 5,7% en 2021 y en comparación con 2,7% de 2019, antes de la pandemia del covid-19.
Sin embargo, las perspectivas para 2023 son muy diferentes, ya que los efectos de la mayor campaña de subida de tipos de interés de la Fed desde la década de 1980 pesan sobre la demanda de los consumidores, la inversión empresarial, los inventarios y el mercado inmobiliario, y el consenso del mercado apunta a una recesión inminente.
Los pronosticadores esperan que la actividad económica se contraiga durante dos trimestres consecutivos a mediados de este año.
Se prevé que el PIB caiga a una tasa anualizada de 0,6% en el segundo trimestre y del 0,3% en el tercero a medida que el gasto del consumidor se estanca, la inversión empresarial disminuye y la producción industrial se debilita, según un sondeo con 73 economistas.
“Las preocupaciones por la recesión están aumentando en los EE UU a medida que la Reserva Federal continúa subiendo las tasas de interés”, dijo James Knightley, economista internacional jefe de ING. “Con más empresas adoptando una postura defensiva, esperamos ver recortes agresivos en los planes de contratación e inversión”.
Los economistas pronostican que la tasa de desempleo subirá desde un mínimo de cinco décadas del 3,5% a casi 5% para fin de año a medida que las empresas reduzcan su personal para controlar los costos. Se espera que las nóminas caigan 45.000 por mes en promedio en el segundo trimestre y luego 104.000 en el período de julio a septiembre.
Eso representaría un gran cambio para un mercado laboral que hasta ahora ha mostrado pocas señales de debilitamiento. Los empleadores agregaron casi un cuarto de millón de puestos de trabajo en diciembre y las solicitudes de seguro de desempleo siguen siendo históricamente bajas.
Un mercado laboral resistente ayuda a explicar por qué algunos economistas están apostando a que EE UU podrá evitar una recesión. De hecho, aún se espera que los salarios crezcan a un ritmo sólido durante gran parte de este año.
Si bien los economistas revisaron a la baja sus expectativas para el índice de precios de gastos de consumo personal, el indicador preferido de la Fed, y el índice de precios al consumidor, se espera que la inflación termine el año muy por encima del objetivo del 2% de la Fed.