El Gobierno aprobó la exoneración en el pago del 15% de Impuesto Sobre Ventas (ISV), a los diferentes estados de la cadena productiva del café: “café en oro, café pergamino seco, café pergamino húmedo y café en uva”. La medida favorece al sector cafetalero que paga una millonaria suma por ese impuesto.
La exoneración fue remitida por la Presidencia, Acuerdo Ejecutivo 352-2022, al Congreso Nacional que lo ratificó.
El decreto modifica el breve listado de los productos cafeteros excluido del pago del ISV, contenidos en los renglones 136 (Café molido en grano hasta una libra) y 240 (café negro servido) del anexo del Acuerdo Ejecutivo 005-2014.
Según el diputado del Partido Liberal, Cristhiam Hernández Saavedra, la exoneración “representa casi 4.500 millones de lempiras de sacrificio fiscal”, pero de beneficio para los productores y los consumidores, ya que reduciría los costos de la producción.
El decreto señala “se mantienen vigentes las excepciones establecidas originalmente en los renglones 136 y 240 del anexo del Acuerdo Ejecutivo 005-2014, por lo que en esos casos, esos subproductos sí están sujetos al pago del Impuesto Sobre Ventas”.
Es decir que seguirán pagando el 15% de impuesto por la compra de más de una libra de café molido en grano, el descafeinado, aromatizado o saborizado, los premium o gourmet e intantáneos.
También pagan impuesto el café servido, incluido el café negro con adiciones de sabor, licor, sucedáneos de leche y especias. Además el café helado, granitas y capuchinos.
“El gravamen al café influirá tanto en el precio del producto, como en la competitividad del sector cafetero, señalan los dictaminadores.
El café generó a la economía 1.165.4 millones por concepto de exportación de 7.6 millones de sacos durante la cosecha 2020-2021. Para esta temporada, que abarca del 1 de octubre de 2021 al 30 de septiembre de 2022, el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) estima unos 1.500 millones de dólares.