La Asociación Hondureña de Energía Renovable (AHER), advirtió que la estatal de energía no está en condiciones de realizar una nueva licitación ya que está en proceso de una reestructuración para solventar sus problemas financieros.
La ENEE reactivó la licitación de 240 megavatios de energía en firme (térmica en especial de gas, carbón o bunker) y los resultados se conocerían la próxima semana.
Al respecto, Elsia Paz, presidenta de la AHER, señaló que el anuncio de Jesús Mejía, gerente de la ENEE, de que la oposición es un complot, no tiene ninguna base ya que la preocupación del sector privado es la recuperación financiera de la empresa pública.
“Realmente no entendemos esa frase de complot, creo que tenemos que pensar como hondureños y pensar hacia dónde va el sector y ser responsables, creo que ante todo es la transparencia del caso”, señaló.
Recordó que la ENEE arrastra una deuda pública de más de 48.000 millones de lempiras y más de 11.000 millones con sus proveedores.
“Una institución que no pueda demostrar liquidez no puede hoy estar hablando de un proceso multimillonario de 240 megawatts”, apuntó.
Informó que los empresarios, en una reunión en la ANDI (Asociación de Industriales), analizaron el tema y concluyeron “por simple lógica de cómo una empresa que hoy está en una transición severa, ante una crisis financiera va a estar haciendo un llamado de una nueva licitación”.
“Es la perspectiva humilde, conocedora y sinceramente no entendemos cómo puede ser un complot algo que se ve muy obvio desde la perspectiva financiera”, señaló.
Revisión de deuda
La dirigenta empresarial consideró que se debe acelerar la contratación de una firma internacional para revisar las finanzas de la ENEE y para eso no entra un llamado de licitación que sería un compromiso presupuestario.
“Primero tienen que estar claros los números de la ENEE para entrar a un nuevo proceso de licitación”, opinó.
Señaló que la deuda con los operadores privados ya acumula seis meses, a pesar de la contratación de nueva deuda efectuada en enero por unos 4.000 millones de lempiras.
Señaló que la urgencia está en las finanzas de la ENEE y en los problemas en generación que tienen los proyectos renovables en ejecución, por ejemplo la represa Petacón, y otros que pueden generar 17 megas y están paralizados.
“Entonces, si hablamos de urgencia para justificar este tipo de contrataciones de corto decisión, tenemos que ver lo evidente, y es que la casi quiebra de la ENEE no permite entender cómo se puede llevar a cabo un proceso con compromiso de largo plazo y de 240 megas”, agregó.
Para la ejecutiva la licitación se puede dividir, saber cuál es la verdadera emergencia, cuántos megas son los que necesitan y ser responsables.
“Creo que se debe de tener cautela y esperar que la banca multilateral y los organismos multilaterales puedan entender la gran crisis de la financiera y ver cómo apoyan y proporcionan, ya sea un préstamo de largo plazo que se ha venido hablando en los medios o se hace una revisión exhaustiva de ese presupuesto y también dónde está la ENEE hoy en términos financieros”, concluyó.