El año pasado el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) aprobó cinco operaciones de financiamiento para Honduras por un monto de $712.8 millones para el sector público, una línea de crédito al sector público no soberano por $5 millones, una ampliación de línea de crédito en el sector privado por $2.5 millones y fondos no reembolsables superiores a $9 millones.
En 2021 los desembolsos fueron por $253.4 millones de los cuales 53.9 % se destinaron para el sector público soberano, 44,4% para el sector privado, 0,6% para el sector público no soberano y 1,1% para donaciones y cooperaciones.
Las cifras fueron divulgadas durante un conversatorio digital con periodistas de la región con el presidente del BCIE, Dante Mossi y Directores de los países miembros.
En el caso de Honduras, el BCIE sostiene que “ha adaptado sus iniciativas al contexto económico y social” de manera que sus operaciones contribuyan en el crecimiento económico y social de su país miembro fundador.
“En esta línea, los esfuerzos del último año se han enfocado en el desarrollo rural y medio ambiente, desarrollo humano e infraestructura social y energía e intermediación financiera para el desarrollo”, informó.
Entre las principales operaciones que se encuentran en la cartera del BCIE en Honduras están 250 millones de dólares para la ENEE, 207.7 millones de dólares para la construcción del puente marítimo Coyolito-Amapala (aún sin desembolsar), 150 millones para “Vivienda Resiliente” (para afectados por Eta e Iota), 70 millones de dólares para “bonos por el cambio climático” y 35 millones para el programa de vacunación (4.4 millones de dosis).
Operaciones que finalizaron su ejecución en 2021
El año pasado concluyeron tres programas crediticios por un valor superior a los 115 millones de dólares, en especial el de Modernización del Documento Nacional de Identificación (DNI). Tramos A, B y C, por $73.1 millones.
“Se creó una nueva base de datos del Registro Nacional de las Personas (RNP) a través de un enrolamiento biométrico a nivel nacional que cumple con estándares internacionales. Este proyecto permitió el enrolamiento de 5.5 millones de personas, la impresión de 5.2 millones de DNI y la entrega de 4.8 millones, los que fueron utilizados en las elecciones generales de 2021”.
También el Corredor Logístico Villa de San Antonio – Goascorán, sección IB (29.96 kilómetros) por $37.2 millones, para completar el Corredor Seco de 100.25 km, que permite atravesar Honduras de norte a sur. Y el Programa social de inclusión a la educación superior (en la UNAG en Catacamas, Olancho) por $5.1 millones.
Siguen en ejecución cinco préstamos por más de 350 millones de dólares, incluyendo el de financiamiento para Mipymes, además de la cartera con el sector privado. En cuanto a cooperaciones y donaciones, el Banco designó $2.8 millones para apoyar iniciativas relacionadas con el desarrollo.
Otras posibilidades de crecimiento
“Es gratificante cómo todos los esfuerzos realizados el año pasado se pudieron materializar con obras que ya están produciendo mucho beneficio a los hondureños. Para este año esperamos formalizar otras iniciativas aprobadas durante 2021 como la ampliación del sistema de abastecimiento de agua potable en la ciudad de Gracias, la reconstrucción de viviendas resilientes (tramo A y B), políticas de desarrollo II (sector energía) y la construcción del puente marítimo Amapala-Coyolito (tramo B y C)”, destacó Dante Mossi.
Honduras es uno de los socios regionales fundadores del BCIE. Su participación accionaria es de 10,79% con un capital suscrito de $714 millones. Durante el período 2016-2020, el Banco aprobó recursos para el progreso socioeconómico equilibrado de Honduras por $1,5811.1 millones y desembolsó $1,530.1 millones.
