Los precios del petróleo subían más de un dólar por barril a más de $71, ya que las expectativas de que la variante del coronavirus omicron cause síntomas en su mayoría leves impulsaban los activos más riesgosos y debido a que el panorama de un aumento inminente de exportaciones de crudo iraní parecía menos probable.
El crudo estadounidense WTI, de entrega en enero, a las 20:11 horas (HCE) ha operado a 69,04 dólares el barril, subiendo unos +2,78 USD (+4,20%) frente a los 66,26 en el cierre del viernes en Nueva York.
Mientras que el petróleo europeo Brent (entrega febrero 2022) ha operado a 72,61 dólares el barril, subiendo unos +2,73 USD (+3,91%) frente a los 69,88 en el cierre del viernes en Londres.
El impulso del hidrocarburo obedece a la reducción de la oferta y aumento de la demanda de la materia prima.
Ayer se reveló el dato de inventario de petróleo en Estados Unidos. El crudo cayó, por segunda semana consecutiva, 910.000 barriles a 433,1 millones.
El precio de la materia prima también se ha visto influenciado por la disminución de las perspectivas de un aumento de las exportaciones de petróleo iraní después de que las conversaciones indirectas entre Washington D.C. y Teherán para salvar el acuerdo nuclear de 2015 se interrumpieran la semana pasada.
Ayer, el ministro de Petróleo de Irak dijo a medios locales que espera que los precios del crudo superen $75. Ihsan Abdul-Jabbar añadió que la Organización de Países Exportadores de Petróleo está tratando de “contener positivamente” el mercado de la energía.
El organismo internacional a cargo de la industria petrolera decidió la semana pasada continuar aumentando el suministro mensual en 400.000 barriles por día en enero.
Además, se espera un crecimiento de la demanda, después de que autoridades sanitarias aliviaran la preocupación frente a la nueva variante de coronavirus.
Si omicron no representa una amenaza para la salud pública, las restricciones de movilidad a nivel mundial se levantarán aumentando la demanda del crudo.
“Lo más optimista para los precios del petróleo es que, según se informa, omicron es menos severo de lo pensado y si siguen más buenas noticias, todos podemos relajarnos un poco y los riesgos a la baja para la economía global se disiparán”, explicó Craig Erlam, analista senior de mercados en Oanda.
La relajación de los temores en torno a omicron también impulsaba las acciones europeas y activos más seguros, como los bonos, retrocedían tras ganancias recientes.