En medio de la emergencia nacional por el COVID-19 los supermercados del país están limitados a vender por servicio a domicilio, una opción que ha demostrado ser insuficiente para abastecer la demanda de alimentos y otros productos.
Ante esto y para evitar aglomeración de compradores, la Asociación de Supermercados de Honduras (ASUPERH) remitió al gobierno un plan de apertura de los 165 establecimientos, bajo control del personal de los comercios y supervisión policial-militar.
Tres opciones de horario y servicio contemplan la propuesta:
Opción A: Abrir todos los días, en horario limitado de 8 am a 3 pm al cliente Opción B: Abrir un día de por medio, en horario limitado de 8 am a 3 pm al cliente Opción C: Por la terminación de la tarjeta de identidad: LUNES: terminación 0 y 1 MARTES: terminación 2 y 3 MIERCOLES: terminación 4 y 5 JUEVES: terminación 6 y 7 VIERNES: terminación 8 y 9
Estas opciones, señalan, evitaría la masiva movilización de la población al establecer horarios y zonas de atención controlada para adquirir productos.
Aseguran que cada cadena de supermercado cumplirá con los procedimientos internos de sanitación, protocolos de manejos de masas,, políticas laborales, respeto a la libre competencia y demás obligaciones legales.
“Las tiendas de supermercado pueden colaborar en informar y concientizar a la población que para evitar aglomeraciones de acuerdo a las medidas estipuladas. Los supermercados tenemos medido que las personas que ingresen realicen su compra en un lapso no mayor a 20 minutos, a fin de que la mayor parte de la población pueda acceder”, agrega la propuesta.
No abastecer a la comunidad puede convertirse en una bomba de tiempo con repercusiones peores a las causadas por la enfermedad del coronavirus(Covid19), señala la ASUPERH.
Hay antecedentes en el país sobre las consecuencias de los prolongados periodos en toques de queda.
“Nuestras cadenas generan mas de 8.200 empleos directos que son fuente de ingresos para proveedores nacionales y productores agrícolas”, agregan.
Abrir una tienda conlleva una logística previa; y operarla requiere tiempo, por manejo de inventarios, manejo de flujos monetarios, fechas de vencimiento delos productos.
Los supermercados garantizan que todos estos procesos estarán listos en tiempo y forma para operar las tiendas en los plazos establecidos y los permisos respectivos con suficiente antelación por el gobierno de la República.
“Solicitamos al gobierno ayuda para mantener el control de las masas a lo externo de las tiendas, asegurándose estos que respeten las cuotas de ingreso y la distancia de 1 metro entre clientes”, así como el libre acceso de los camiones proveedores puedan llegar a las tiendas y a los centros de distribución.
Las comunidades libres de casos se pueda permitir acceder con mayor facilidad a las tiendas de supermercado, opinan, al mismo tiempo que piden la colaboración de la banca para la recolección de valores, “ya que cuando ellos no operan tenemos el reto del flujo de cambio”.
La propuesta de los supermercados sigue siendo analizada por el Ejecutivo.