Mientras las autoridades de Energía mantienen la “confianza” en recuperar la mora histórica por el servicio de energía, la misma aumentó en 1.850 millones de lempiras entre julio de 2021 y julio de 2022.
La mora pasó de 13.917 millones el año pasado a “15.767 millones de lempiras al cierre de julio pasado”, según las cifras de la Subgerencia de Planificación y Gestión Comercial.
Este aumento es del 13%, y ocurre a pesar de la nueva “estrategia de recuperación” de la mora, el subsidio a los consumidores de hasta 150 kilovatios hora al mes (aún a morosos) y la obligación contractual de recuperación que tiene la Empresa Energía Honduras (EEH).
Las cifras preliminares indican que la mayor mora está en la zona Centro-Sur del país y la misma suma 7.206 millones de lempiras, seguido de la región Nor Occidente se registran 6.918 millones, y en el Litoral Atlántico 1.643 millones de lempiras.
La mayor parte de la morosidad supera los 120 días (cuatro meses), lo que reafirma el hecho que la ENEE ni EEH, han depurado la lista de morosos de las última década.
El sector público debe L4.385 millones
Aunque la mayor mora a nivel nacional es residencial con 7.837 millones de lempiras (el 50% de la mora a julio), el Gobierno (incluyendo entes autónomos y municipalidades), adeudan el 28% del total con “4.385 millones de lempiras”.
En la capital se encuentra la mayor mora de los entes Autónomos (1.639 millones), mientras que en el noroccidente está la principal deuda Residencial con 3.840 millones de lempiras y la Comercial (1.693 millones).
La larga lista de morosos incluye a casi todas las entidades públicas, que según la Ley de Responsabilidad Fiscal y otras disposiciones presupuestarias, debería ser debitada directamente por la Secretaría de Finanzas y trasladada a la cuentas de las ENEE.
Según el ministro de Energía, y gerente de la ENEE, Erick Tejada, se trata de otra “herencia” de la administración anterior y que Finanzas “crearía mecanismos para las instituciones (morosas) cumplan”.
También contemplan mecanismos de compensación, como el intercambio de seguridad militar (FF AA) a cambio de reducir la deuda. “Vamos a ser creativos, pero sí estamos muy claros dónde está la mora y qué podemos hacer con el sector gobierno para irla aplacando”, apuntó.