En términos reales se registró una caída de 11%, según nueva evaluación de la Unctad
La IED (Inversión Extranjera Directa) mundial La IED global en 2024 aumentó ligeramente, un 4%, de 1,45 billones de dólares a 1,51 billones de dólares, segúna la nueva revisión de la UNCTAD (Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo).
Sin embargo, esta cifra principal oculta importantes debilidades subyacentes. Esta cifra se vio inflada por la volatilidad de los flujos financieros a través de varias economías europeas con altos niveles de flujos de canalización.
Varias economías europeas, como Irlanda, Luxemburgo, Países Bajos y Suiza, donde las estadísticas de IED se ven significativamente afectadas por los flujos financieros canalizados, registraron grandes fluctuaciones y cifras negativas en 2023 y 2024. La disminución de las cifras negativas en 2024 tuvo un efecto positivo neto en los flujos globales de aproximadamente 230.000 millones de dólares.
Si se excluyen estos, los flujos mundiales de IED disminuyeron un 11% en términos comparables, de 1,67 billones de dólares a 1,49 billones de dólares, lo que marca el segundo año consecutivo de contracción de dos dígitos y confirma la persistente fragilidad de los flujos de inversión internacional.
El nuevo informe es una revisión a la baja desde la proyección de la Unctad en enero de este año
La IED en los países en desarrollo sigue estando muy concentrada.
Entre los países desarrollados, la fuerte caída de las entradas en Europa contrastó marcadamente con el aumento de la inversión en América del Norte. Los flujos de IED hacia los países en desarrollo se mantuvieron estables, a pesar de los considerables aumentos en África y el Sudeste Asiático. Los flujos disminuyeron en Asia Oriental y América del Sur. Diez receptores representan tres cuartas partes de las entradas de los países en desarrollo.
La inversión en la economía digital es el único sector en crecimiento.
Las tendencias sectoriales mostraron una menor inversión en la mayoría de los sectores de infraestructura. Los anuncios de proyectos en las industrias con uso intensivo de la cadena de suministro se mantuvieron estables. En cambio, los sectores digitales duplicaron el valor de sus proyectos. El creciente peso de la IED en los sectores de la economía digital se refleja en la composición de las 100 principales empresas multinacionales; las empresas tecnológicas representan ahora más del 20 % de sus ingresos.La inversión en los Objetivos de Desarrollo Sostenible está en crisis.
La inversión en los Objetivos en los países en desarrollo se redujo entre una cuarta parte y una tercera parte en infraestructura, energías renovables, agua y saneamiento, y sistemas agroalimentarios. Solo el sector de la salud registró un crecimiento positivo en 2024, aunque partiendo de una base pequeña.
La prolongada contracción de la financiación para proyectos tiene importantes implicaciones para la Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo. Entre 2021 y 2024, el valor de la financiación para proyectos se redujo en más del 40 %. Esta recesión afecta desproporcionadamente a los PMA, que dependen en mayor medida de las fuentes internacionales de financiación.
Las perspectivas para 2025 se han tornado negativas
A principios de año parecía posible un crecimiento moderado, pero la escalada de las tensiones comerciales, la fragmentación geopolítica y la volatilidad económica han provocado fuertes revisiones a la baja de la mayoría de las perspectivas de IED. Estas incluyen el crecimiento del PIB, la formación de capital, los flujos comerciales, la estabilidad del mercado financiero y la confianza de los inversores. Los datos de principios de 2025 muestran una actividad de acuerdos y proyectos históricamente baja.
El Informe sobre las inversiones en el mundo insta a tomar medidas audaces y coordinadas para reorientar la inversión hacia un desarrollo sostenible e inclusivo, con especial atención a la reducción de las brechas en la economía digital, la infraestructura y las finanzas sostenibles.
“La inversión es más que flujos de capital y cartera de proyectos. Es una señal de dónde apostamos como sociedad”, dijo Rebeca Grynspan, Secretaria General de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD)
Las tendencias regionales revelan profundas divisiones.
La IED hacia las economías desarrolladas cayó un 22%. Europa fue la más afectada, con entradas que cayeron un 58% en 2024. La IED cayó en más de la mitad de los países de la UE, con fuertes caídas en Alemania (-89%), España (-39%), Italia (-24%) y Francia (-20%).
América del Norte registró un aumento del 23%, impulsada por una ola de megaproyectos de semiconductores en Estados Unidos, donde la IED aumentó un 20%.
África experimentó un aumento récord del 75% en la IED, impulsado por un megaproyecto de infraestructura en Egipto. Sin contar este, los flujos crecieron un 12%, impulsados por reformas de inversión y una mayor facilitación en todo el continente.
Asia se mantuvo como la principal región receptora, a pesar de una disminución general del 3% y una caída del 29% en los flujos hacia China. El Sudeste Asiático destacó, con los países de la ASEAN aumentando un 10%, alcanzando una cifra récord de 225.000 millones de dólares en IED. India experimentó un fuerte impulso en la inversión en nuevas instalaciones, aun cuando las entradas totales disminuyeron ligeramente.
Oriente Medio siguió registrando fuertes entradas de capital, especialmente en el Golfo, gracias a los esfuerzos de diversificación y a la inversión en sectores no petroleros.
América Latina y el Caribe experimentó una caída del 12% en la IED. Sin embargo, los nuevos proyectos greenfield en Argentina, Brasil y México indicaron un renovado interés de los inversores y un impulso creciente en los sectores productivos.
Las economías vulnerables experimentaron avances modestos. La IED dirigida a los países menos adelantados aumentó un 9%, alcanzando los 37.000 millones de dólares, lo que representa tan solo el 2% de los flujos mundiales. Los países en desarrollo sin litoral experimentaron una caída del 10%, mientras que los pequeños Estados insulares en desarrollo registraron un crecimiento del 14%. En los tres grupos, la IED sigue concentrándose en unos pocos países.