El índice de precios al consumo (IPC) de Japón subió un 2,8% interanual en agosto, con lo que encadena 36 meses consecutivos de subidas del indicador, que lleva ya más de dos años por encima de la meta inflacionaria del 2 % del Banco de Japón (BoJ), según datos gubernamentales publicados este viernes.
El aumento del indicador, que excluye los precios de los alimentos frescos debido a su alta volatilidad, indica una aceleración de los precios con respecto a los incrementos interanuales de julio (2,7%) y junio (2,6%), de acuerdo al informe elaborado por la Oficina de Estadística del Ministerio del Interior y Comunicaciones nipón.
Los precios de los alimentos, sin tener en cuenta los frescos, se encarecieron un 2,9% interanual, tres décimas por encima del mes precedente, con las mayores subidas correspondientes a los costos de las verduras y algas (9,5% frente al 4,9% de julio), las frutas (9,4% respecto al 9,1% del mes previo) y los cereales (6,5% frente al 4,2% del séptimo mes del año).
Respecto a los costos energéticos, estos se encarecieron un 15%, con subidas de la electricidad y el gas del 26,2% y del 11,1%, respectivamente.
El precio de los carburantes, por su parte, cedió un 0,7% interanual en agosto, lo que supone la primera bajada en más de un año (desde julio de 2023).
Subieron además los precios de las actividades relacionadas con el ocio y el entretenimiento, un 4,8% interanual de media, con un avance del 6% en lo que respecta al sector servicios vinculado a esta industria.