El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, decretó este viernes la subida del impuesto del valor agregado al 15% desde el 1 de abril conforme lo había anunciado después de lograr sacar adelante la reforma que le permitía elevar la tarifa a esa nivel.
La reforma que logró sacar adelante Noboa subía el IVA del 12% al 13%, pero permitía que el presidente lo aumentase hasta el 15% previo informe favorable del Ministerio de Economía y Finanzas, con lo que confía en elevar la recaudación en unos 1.300 millones de dólares.
Noboa se jugó la carta impopular de subir este impuesto para equilibrar la balanza fiscal del Estado, tras haber recibido una administración con un déficit de unos 4.800 millones de dólares en 2023, lo que equivale a casi el 5% del producto interno bruto (PIB), y también para financiar el “conflicto armado interno” que le declaró a las bandas del crimen organizado.
El decreto emitido por Noboa no especifica si la subida del IVA al 15% será permanentemente o eventualmente retornará al 13%.
“Esta decisión se toma considerando que es importante emprender acciones económicas responsables para enfrentar el conflicto armado interno y garantizar los ingresos que coadyuven a la sostenibilidad de las finanzas públicas, así como a la estabilidad fiscal”, añadió la Presidencia de Ecuador en un comunicado.
La reforma tributaria que contempla la subida del IVA también contiene el incremento de otros impuestos por iniciativa de la Asamblea Nacional (Parlamento), como el retorno del impuesto de salida de divisas (ISD) del 3,5% al 5%, que también comenzará a regir desde inicios de abril.
También se aprobó la creación de un impuesto especial a los beneficios de los bancos y las cooperativas de entre el 5 % y el 25%, así como gravar con una tasa del 5% a los materiales de construcción.
El Gobierno también trabaja en un plan para focalizar los subsidios a los combustibles, que en 2023 supusieron un gasto estatal de unos 3.200 millones de dólares.
Actualmente en Ecuador están congelados los precios de las gasolinas de 85 octanos, las de mayor consumo, a 2,40 dólares por galón (3,78 litros), mientras que el diésel tiene un precio fijo para el consumidor de 1,75 dólares por galón.
Por otro lado, Noboa también ha anticipado su intención de evaluar la posibilidad de dilatar el cierre y desmantelamiento del Bloque 43-ITT, uno de los mayores yacimientos de petróleo de Ecuador, cuyos ingresos para el Estado son de unos 1.200 millones de dólares, según cifras oficiales.
En agosto pasado los ecuatorianos votaron en un plebiscito nacional a favor de cesar la explotación del Bloque 43-ITT en favor de preservar el amazónico Parque Nacional Yasuní, pese a tener reservar por valor de unos 13.600 millones de dólares para los próximos veinte años.
De acuerdo con el fallo de la Corte Constitucional que aprobó la realización de esta consulta popular, el Gobierno tiene hasta agosto de este año para cumplir con lo aprobado en esa votación.
Con estas medidas el Gobierno de Noboa ha logrado que la prima de riesgo de Ecuador se reduzca de 2.141 puntos a 1.265 unidades, lo que de nuevo abre el escenario de acceso del país a mercados de deuda para atender sus necesidades de financiación.
Y en ese contexto tanto el Ejecutivo como el Fondo Monetario Internacional (FMI) anunciaron la pasada semana el inicio de una negociación para un acuerdo crediticio, después de que en 2022 el país andino concluyese por primera vez en dos décadas un programa de esta institución, ascendente a 6.500 millones de dólares.