Pedro Barquero, director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC),cuestionó la política financiera de los últimos diez años, al señalar los pocos resultados obtenidos a pesar de los millonarios ingresos que han manejado los gobiernos.
Esta semana el Poder Ejecutivo remitirá al Congreso Nacional el anteproyecto de Ley de Presupuesto para el 2020, que superaría la cifra de los 263.000 millones de lempiras.
Al respecto, el dirigente empresarial señaló que “lo preocupante es que hemos visto como la recaudación tributaria ha aumentado los últimos ocho o diez años un 250% y al mismo tiempo la deuda pública creció alrededor de un 400% y la pobreza aumentó un 4%”.
“Eso quiere decir que darle más dinero o más recursos al gobierno no ha funcionado para nada, más que deteriorar la calidad de vida de los hondureños”, declaró.
En opinión de Barquero, el uso del presupuesto gubernamental ha llevado al país a un retroceso. “Lo que se tiene que hacer es buscar ahorro en ese presupuesto a través de un manejo eficiente y transparente de los recursos y que no se pierda en corrupción una gran parte del mismo”, estimó.
Según el CNA y el BID, agregó, cada año se pierde por corrupción entre 20.000 a 50.000 millones de lempiras.
“Ese dinero debería de ahorrarse y destinarlo para educación, salud y para que se revisen impuestos a la baja para estimular la economía generando empleo y así reducir la pobreza”, estimó.
El director de la CCIC, cuestionó también el proceso de socialización del presupuesto (por parte de Finanzas). “Es imposible tener un análisis del presupuesto para poder opinar en un par de horas, Es poco lo que se puede aportar”.
“Si realmente hubiera voluntad de recibir opiniones de las diferentes organizaciones y de la ciudadanía en general se debería de entregar todos los archivos del presupuesto por cada institución y dar un tiempo para que las personas puedan analizarlo a conciencia”, agregó.