Tal como hizo el ex presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández en 2018, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, buscará la reelección basado en una resolución de magistrados de la Corte Suprema para pasar por encima del artículo 152 de la Constitución que prohíbe un segundo mandato.
Nuevas Ideas, el partido del mandatario, anunció la noche del domingo que ha inscrito las precandidaturas de Bukele y su vicepresidente, Félix Ulloa, para compartir por la reelección en las elecciones previstas para el próximo año. La candidatura de Bukele se sustenta en un controvertido fallo de la Sala de lo Constitucional, cuyos jueces, nombrados por el mandatario, hicieron una lectura de la Constitución que despeja el camino del popular presidente para repetir mandato.
Aunque Bukele no se ha pronunciado sobre el anuncio de su partido, sí retuiteó el mensaje que Nuevas Ideas publicó el domingo en su cuenta de Twitter. “Comunicamos al pueblo salvadoreño que el Presidente Nayib Bukele y el vicepresidente Félix Ulloa ya están inscritos como precandidatos para Presidente y Vicepresidente de la República de El Salvador, en el partido más grande de la historia de El Salvador. Las Nuevas Ideas son invencibles”, apuntaba el movimiento creado por Bukele y que se ha convertido en una fuerza política arrolladora en El Salvador.
(VEA: Nayib Bukele anuncia que buscará la reelección)
Bukele cuenta con una enorme popularidad en su país y la región y se da por descontado que ganará las próximas elecciones, a pesar de las críticas hechas a sus medidas para combatir la delincuencia. Bukele ya había consolida su poder en 2021 con una victoria sin precedentes en las elecciones legislativas, tras lograr un número de diputados inédito que le ha permitido el control de importantes instituciones y le ha dado mano libre para impulsar su agenda política, que incluye una guerra contra las pandillas que desangraban el país.
Desde hace un año, Bukele mantiene un estado de excepción en El Salvador y la suspensión de las garantías constitucionales, además de impulsar una fuerte reforma en las cárceles y de apresar a más de 68.000 personas, acusadas de pertenecer a agrupaciones criminales. El mandatario ha reaccionado con mofa a las críticas de organizaciones de derechos humanos que denuncian sistemáticas vejaciones contra los detenidos y de opositores políticos, que lo tildan de un nuevo “dictador”.
La oposición, precisamente, se ha visto desbordada por el huracán político que representa Bukele y su movimiento.
Prácticamente sin oposición fuerte, con un enorme control de todo el aparato del Estado y con el apoyo popular a su favor, Bukele solo cumple un mero trámite para lograr la reelección. El mandatario, que no ha tenido que reformar las leyes para lograr consolidarse en el poder, pasa de esta forma por encima de la Constitución, que en el artículo 152 establece que no puede ser candidato a presidente “el que haya desempeñado la Presidencia de la República por más de seis meses, consecutivos o no, durante el periodo inmediato anterior, o dentro de los últimos seis meses anteriores del periodo presidencial”.
Los magistrados de la Corte de los Constitucional hicieron una controvertida lectura de las leyes y decidieron que Bukele sí puede reelegirse. De esta manera, Bukele contradice sus propias posiciones críticas cuando aspiraba a llegar a la Presidencia. “La Constitución no permite que la misma persona sea presidente dos veces seguidas. Eso es para garantizar que no se mantenga en el poder y que se que ocupe el poder para quedarse en el poder”, dijo hace unos años el joven político en un programa de televisión.