El Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva anunció este jueves que eliminará los aranceles para las importaciones de varios productos en un esfuerzo por bajar los precios de los alimentos y frenar la inflación en Brasil.
Carne, café, azúcar, maíz y aceite de oliva están entre los productos que no pagarán gravámenes para ingresar al país.
Según explicó en una rueda de prensa el vicepresidente Geraldo Alckmin, la idea es “estimular” la competencia en favor del consumidor “para favorecer los precios”.
Actualmente el arancel de importación sobre la carne es de 10,8 %, el del café, de 9 %, el del azúcar, de 14 % y el del maíz, de 7,2 %.
De acuerdo con Alckmin, la eliminación del gravamen al maíz, por ejemplo, se reflejará en el precio de los huevos y de las proteínas animales.
Otros productos a los que les será eliminado el arancel de importación serán las sardinas, las galletas, el aceite de girasol y pastas.
La medida, que entrará en vigor en los próximos días, se anunció luego del encuentro que sostuvo este jueves el mandatario brasileño con varios de sus ministros y empresarios del sector de alimentos y de abastecimiento, en el Palacio presidencial de Planalto.
El alza de los precios de los alimentos es uno de los factores a los que se atribuye la pérdida de popularidad de Lula, cuyo índice de aprobación se ubica en el 24 %, según el último sondeo de Datafolha, el menor nivel de sus tres mandatos presidenciales.
Brasil registró una inflación del 4,83 % en 2024, una tasa superior a la de 2023 (4,62 %) y por encima del techo de la meta fijada por el emisor.
Ante la subida de los precios, el Banco Central viene elevando la tasa básica de interés, que se ubica en el 13,25 % anual, y que se espera que suba de nuevo la próxima semana, según las expectativas del órgano emisor.
El gobierno teme que el aumento de los tipos para frenar la inflación pueda desacelerar el crecimiento económico.