El gobernador del Banco Popular de China (BPC, banco central), Pan Gongsheng, avanzó este martes medidas de apoyo a la recuperación económica como rebajas a los requisitos de reserva a bancos (RRR), a las tasas de ‘repos’ a 7 días o a los tipos de interés para préstamos hipotecarios ya existentes.
En una rueda de prensa celebrada en Pekín, el funcionario especificó que el recorte a los RRR, que es el porcentaje de fondos que un banco no puede prestar, se traducirá en una inyección de en torno a un billón de yuanes (141.697 millones de dólares, 127.568 millones de euros) en el mercado.
Además, Pan indicó que las tasas de ‘repos’ -una de las principales y más habituales herramientas del BPC para inyectar liquidez al sistema financiero- bajarán del 1,7% al 1,5% y que los tipos de interés para préstamos hipotecarios ya existentes se reducirán en medio punto.
Medidas son insuficientes, según analistas
El paquete de medidas de apoyo representa un paso “en la dirección correcta” pero todavía se antoja insuficiente para generar una remontada significativa en el crecimiento económico, según analistas.
Julian Evans-Pritchard, de Capital Economics, celebra que Pekín “haya dejado atrás su método anterior de goteo de medidas de apoyo fragmentadas” y hayan apostado por un “paquete coordinado” de estímulos, pero cree que, pese a ser “un paso en la dirección correcta”, se necesita todavía más.
“Probablemente será insuficiente para provocar un cambio de rumbo, a menos que detrás venga un mayor apoyo fiscal”, indicó en un informe tras la rueda de prensa en la que los jefes del Banco Popular de China (BPC, banco central) y de los reguladores del sector financiero y del mercado de valores anunciaron esas medidas.
Zhu Tian, profesor de económicas de la escuela de negocios CEIBS, asegura en declaraciones al diario hongkonés South China Morning Post que ya hay “una dirección más clara hacia la flexibilización de la política monetaria, pero esto, por sí mismo, es definitivamente inadecuado”.
Repunte en los mercados
“La clave es ayudar al mercado a tener más expectativas de que se seguirá relajando la política monetaria y de que se están preparando más (medidas de) apoyo”, indicó el experto.
Evans-Pritchard coincide en este punto: “El razonamiento (de convocar esa rueda de prensa) era claramente que el efecto impulsor de la confianza de revelar todo de una tacada ayudaría a hacer que el paquete de estímulos sea más que solamente la suma de sus partes”.
Y el mensaje ha sido bien recibido en los mercados: el índice de referencia de la Bolsa de Hong Kong subía un 2,89 % pasadas las 11.00 hora local (03.00 GMT), con importantes repuntes también en Shanghái (+1,94 %) y Shenzhen (+2,01 %).
El índice CSI 300, que aglutina a los trescientos principales valores de esos dos últimos parqués -los dos principales de la China continental-, subía un 1,88 % a la mencionada hora.
Capital Economics considera que la política monetaria “ha perdido mucha de su efectividad” en China ante una coyuntura en la que los hogares intentan reducir su deuda y muchas empresas privadas se muestran precavidas a la hora de solicitar crédito.
Por ello, Evans-Pritchard cree que, para conseguir que el crédito y la actividad económica revivan, Pekín necesita “un apoyo fiscal más considerable que el modesto repunte proyectado para el gasto público”, aunque esto chocaría con las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda.
“Lo más importante del anuncio de hoy es que apunta a una mayor sensación de urgencia a la hora de prestar apoyo a la economía, algo que no se veía antes”, agrega el analista.