Como parte de su compromiso por desarrollar productos e iniciativas que impacten positivamente la vida de las personas, las empresas Kimberly-Clark y Walmart unen esfuerzos para impactar positivamente a las comunidades centroamericanas.
Ambas compañías trabajan juntas por séptimo año consecutivo para llevar a cabo el programa global de saneamiento “Baños Cambian Vidas”, y contribuir a la lucha contra la crisis sanitaria en Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador.
En Honduras se restablecerá el servicio de agua en 13 comunidades mediante la rehabilitación de 12 sistemas de agua comunitarios que atienden a más de 23.000 personas y que fueron dañados por los huracanes Eta e Iota en las comunidades de Chinda, El Negrito y San Antonio de Cortés.
Además, se apoyará a la Asociación de Distritos del Centro de La Paz (MAMCEPAZ) para rehabilitar cinco sistemas comunitarios de agua potable que llegan hasta la infraestructura de saneamiento en 15 escuelas
“Para Walmart, contribuir al desarrollo de las comunidades en donde opera es de gran importancia. Por ello, invita a sus clientes para que se acerquen a las tiendas y apoyen esta iniciativa, que permitirá a los pobladores de las regiones beneficiadas mejorar su calidad de vida”, expresó Lynda Marín, Subgerente de Asuntos Corporativos de Honduras.
La expectativa de la marca Scott de Kimberly-Clark, a través de esta campaña es impactar a más de 49 mil personas en estos países con activaciones locales que llevan baños, educación sobre higiene y acceso al agua potable a las comunidades locales más vulnerables.
“Sabemos que nuestro negocio tiene un rol positivo que desempeñar en el mundo y en las comunidades donde operamos, y estamos decididos a asegurarlo a través de nuestro programa Baños Cambian Vidas”, agregó Gonzalo Uribe, Presidente de
Kimberly-Clark Latinoamérica.
En el 2021, el programa brindará asistencia de impacto social en comunidades del El Salvador, en asociación con la ONG Plan International y en Guatemala, Nicaragua y Honduras, en asociación con la ONG Water For People.
El programa ha cambiado significativamente la vida de más de 1.3 millones de personas en la región y ha ayudado a mejorar el acceso a las condiciones básicas de higiene y saneamiento para las comunidades latinoamericanas más vulnerables.