El primer debate presidencial entre Joe Biden y Donald Trump transcurrió tal como lo proyectaban los analistas desde el principio: ambos atacaron sus respectivas administraciones y se acusaron de ser los peores presidentes.
La economía fue uno de los temas centrales, pero ninguno lanzó propuestas concretas. Trump se autoelogió por el manejo de la pandemia y por la atracción de inversión con sus recortes de impuestos. Además culpó a Biden de la elevada inflación que afrontan actualmente los estadounidenses.
El actual mandatario de los estadounidenses se defendió asegurando que, durante el mandato del republicano no se elevó el costo de vida porque la economía estaba diezmada: “Nosotros hemos creado miles de empleos”.
Ambos candidatos llegaron al debate con un empate técnico en la intención de voto, según una encuesta de YouGov y The Economist que los muestran con 42% de intención de voto. Sin embargo, ninguno expuso métricas claras sobre los tópicos que más interesan a los estadounidenses: migración, política económica y relaciones internacionales.
Sobre la política exterior, Trump atacó a su contendiente y señaló que “si tuviéramos un verdadero presidente, (Vladimir) Putin nunca habría invadido a Ucrania”. Además, cuestionó el apoyo financiero a Ucrania al resaltar que “cada vez que (Volodimir Zelenski) viene aquí se va con millones. Yo haré que esta guerra se termine. Acabaré con esto, con la gente que muere sin motivo”.
Donald Trump aprovechó el espacio para mencionar recurrentemente que Biden descuidó la seguridad fronteriza. Y al referirse al desempleo entre la población afroamericana, aseguró que su rival “ha permitido el ingreso de miles de personas por las fronteras que toman los empleos de los afro y los hispanos”.
La avanzada edad de los candidatos también se incluyó en la discusión y ambos defendieron que no sería un problema para ellos. Sin embargo, los analistas que siguieron el debate coincidieron en que el presidente Joe Biden se veía notablemente débil.
Decepcionante fue el otro adjetivo de los analistas, quienes aseguraron que el debate transcurrió entre las mentiras de Donald Trump y la pasividad de Biden, a quien identifican como el gran perjudicado por su imagen de funcionario en una edad avanzada.