La calificadora de riesgo Moody’s mantuvo la calificación soberana de Colombia en Baa2, con lo que mantiene el grado de inversión. Sin embargo, la perspectiva cambió de estable a negativa.
“Esta decisión se debe a las condiciones macroeconómicas retadoras que tiene el país, que están asociadas a un débil crecimiento económico para este año, un incremento sostenido en el costo de endeudamiento que podría deteriorar el manejo fiscal y el perfil crediticio hacia adelante”, precisó Moody’s.
Antes que se presentara el Marco Fiscal de Mediano Plazo por parte del Gobierno, Moody’s había alertado que la mayor preocupación es el aumento en el costo de financiamiento, especialmente en los intereses de la deuda, que se espera que representen el 15% de los ingresos del país este año.
En ese sentido, expresaron que también ha influido el ambiente político.
“Los comentarios del presidente Gustavo Petro, como su propuesta de renegociación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional, seguida de una rectificación por parte del ministro de Hacienda, han contribuido a esta incertidumbre”, expresó la calificadora de riesgo.
Resaltan que en conjunto, estos factores están obstaculizando la capacidad presente y futura de las autoridades para cumplir con la regla fiscal, lo que aumenta el riesgo de un posible deterioro del perfil crediticio de Colombia.