El Banco Central es el mayor acreedor, seguido de los entes descentralizados
Mientras continúa el debate sobre las reformas fiscales, la situación financiera del país sigue debilitándose. La deuda interna bruta de la Administración Central mostró un incremento interanual de 11,4% en 2022 y con ello superó los 200.407 millones de lempiras.
Los principales acreedores son el Banco Central de Honduras (BCH) con el 31,3% del total que significan “62.720 millones de lempiras” y los Organismos Descentralizados con 29,7% que sumaron 59.554 millones de lempiras.
Según el boletín estadístico “Edición especial 2022”, del BCH, la deuda bruta en 2021 fue de 179.876 millones de lempiras, es decir que el año pasado aumentó en “20.531 millones de lempiras”.
La deuda con el Banco Central casi se duplicó el año pasado, pasó de 36.897 millones de lempiras en 2021 a 62.720 millones. También creció con los entes descentralizados.
Y es que el Congreso Nacional autorizó el año pasado el “endeudamiento extraordinario” del BCH para apoyar la gestión del Gobierno Central.
En el caso de los Banco Comerciales, la deuda cerró en 43.336 millones de lempiras, menor a los 50.635 millones registrados a diciembre de 2021.
Con las AFP (/ Administradoras de Fondos de Pensiones), la deuda también creció desde 22.931 millones de lempiras en 2021 a 23.887 millones en diciembre de 2022.
El monto de la deuda interna supera el 25% del PIB, que es el valor de la producción anual de bienes y servicios del país.