La calificadora de riesgo Standar & Poor’s confirmó las notas soberanas de El Salvador de largo y corto plazo de ‘B-‘ y ‘B’ con perspectiva estable, confiando en que ha mejorado la “capacidad del gobierno para aprobar reformas” con la victoria legislativa del partido oficial, aunque recalcan que la capacidad de refinanciamiento limitará las medidas a tomar.
“La perspectiva estable refleja nuestra expectativa de que El Salvador continúe recibiendo importante apoyo externo en 2021, ante una situación fiscal deteriorada, que brindará liquidez y limitará el riesgo de refinanciamiento de la deuda soberana en los siguientes 12 a 18 meses”, señala el comunicado.
Para S&P la calificación del país refleja las ‘debilidades institucionales, el bajo ingreso per cápita, una tendencia de crecimiento moderado del PIB, finanzas débiles y la elevada carga de deuda del soberano, aunque esperan que el Gobierno “apruebe medidas para corregir las debilidades fiscales y mejorar la credibilidad de las políticas”.
Entre estas medidas se encuentra el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) “que garantizaría el financiamiento oficial y proporcionaría un ancla de política para la corrección fiscal”. El organismo espera que el crecimiento del PIB ronde este año un 4% y los próximos años volverá a los niveles de 2 % y 2.4% .
“El presidente Bukele se beneficiará de un nivel muy fuerte de gobernabilidad que debería ayudar a aprobar reformas, aprobar presupuestos, nuevos préstamos y nombramientos clave en la Corte Suprema de Justicia (cinco de los quince jueces serán renovados en la próxima legislatura) y el fiscal general. Sin embargo, una mayor concentración de la formulación de políticas en manos del presidente podría afectar los ya débiles pesos y contrapesos entre las instituciones públicas del país”, detalla el informe.